Nacional
Llover sobre mojado
Que un trabajador de la construcción caiga de un andamio es considerado un accidente laboral por todas las bibliotecas. Pero que un peón rural pierda la vida arrastrado por la corriente de un arroyo crecido, intentando rescatar bovinos, es visto en el medio rural más como una desgracia climática que como una consecuencia de trabajar sin mínimas condiciones de seguridad. El martes 20, el joven asalariado rural Néstor Pérez, de 17 años, fue enviado por el capataz del establecimiento donde se desempeñaba a buscar vacunos cerca del arroyo Sauce, en la localidad homónima, ubicada al este del departamento de Cerro Largo, cerca de la frontera con Brasil. El cuerpo sin vida del peón rural fue hallado por un integrante de su familia el viernes.