Miles de personas se manifestaron este sábado en más de 200 ciudades de Brasil para protestar contra la gestión del presidente Jair Bolsonaro, en particular por su manejo de la pandemia en el país, que este sábado superó las 460.000 muertes por coronavirus. Con la consigna “Por la vida”, las de este #29M son las primeras convocatorias masivas desde el inicio de la emergencia sanitaria.

Protesta en contra del presidente brasileño en Río de Janeiro.

Protesta en contra del presidente brasileño en Río de Janeiro.

Foto: Mauro Pimentel, AFP

En el centro de Río de Janeiro fueron unas 10.000 personas que gritaban “fuera Bolsonaro”, “Bolsonaro genocida”, “vacuna ya” o “fuera Bolsovirus”. Los reclamos apuntaban a mejorar el proceso de vacunación contra el coronavirus y a generar mayores ayudas económicas para los sectores más afectados por la pandemia, y, según informó Deutsche Welle, también hubo reclamos contra la deforestación de la Amazonia y el racismo.

También hubo movilizaciones en Brasilia, Belén, Curitiba, Manaos, Fortaleza y San Pablo, la más multitudinaria, por la avenida Paulista. Según relatan las crónicas, la mayor parte de la gente utilizó tapabocas, aunque hubo aglomeraciones; además, en las convocatorias se pedía mantener el distanciamiento y que quienes pertenecieran a grupos de riesgo no participaran.

Las marchas fueron convocadas por centrales sindicales, partidos de izquierda y movimientos sociales. “Estar en las calles para luchar es un acto extremo para decir basta”, señaló el Partido de los Trabajadores (PT) en su convocatoria.

Protesta en contra del manejo de la pandemia de COVID-19 por parte del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, en Belo Horizonte.

Protesta en contra del manejo de la pandemia de COVID-19 por parte del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, en Belo Horizonte.

Foto: Douglas Magno, AFP

Las manifestaciones se dan luego de dos fines de semana con eventos en apoyo al gobierno convocadas por el propio Bolsonaro, que tiene actualmente el mínimo respaldo popular: según el último sondeo de Datafolha, su aprobación está en 24%.

Desde el inicio de la pandemia, Bolsonaro comparó el virus con una “gripecita” o un “resfriadito”, dijo que se estaba “sobredimensionando el poder destructivo de este virus”, cuestionó las medidas de restricción de la movilidad y recomendó el uso de cloroquina para prevenir la enfermedad.

En Recife la movilización fue dispersada por la Policía con gas lacrimógeno, y hubo manifestantes con lesiones en los ojos por el uso de balas de goma disparadas por la Policía Militarizada, informó Efe, que añadió que los manifestantes denunciaron el uso de gas pimienta y detenciones arbitrarias.