“Con esta voz, tranquila pero firme, debemos decir con preocupación que vemos gravemente lo que ocurre en Cuba, en Nicaragua y en Venezuela”, dijo este sábado el presidente, Luis Lacalle Pou, en la reunión de jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
“Uno de los elementos que impulsa y que es plataforma de la Celac es la democracia, y la democracia es el mejor sistema que tiene el individuo para ser libre. El estado más puro de una persona es la libertad, y por eso participar de este foro no significa ser complaciente. Con el respeto debido, cuando uno ve que en determinados países no hay una democracia plena, cuando no se respeta la separación de poderes, cuando desde el poder se usa el aparato represor para acallar las protestas, cuando se encarcelan opositores, cuando no se respetan los derechos humanos, nosotros con esta voz, tranquila pero firme, debemos decir con preocupación que vemos gravemente lo que ocurre en Cuba, en Nicaragua y en Venezuela”, dijo el mandatario en su discurso inaugural.
Aseguró además que la pandemia por la covid-19 demostró que “cuando no se puede acceder a mercados, a educación, a los bienes de primera necesidad, y en este caso a la salud, no hay libertad posible para todos”, y cuestionó el mecanismo de la Organización Mundial de la Salud para promover el acceso a las vacunas, Covax.
Lacalle Pou dijo que hay que apelar a la solidaridad internacional, resaltando lo bueno y lo malo: “El sistema de distribución de vacunas del mecanismo Covax ha sido deficitario. Claramente aquellos países que no pudieron acceder a las vacunas mediante su compra directa han quedado relegados”, dijo, y aseguró: “No se trata de huir, de derogar ni actitud destructiva. Se trata de criticar para construir”.
Además, ante críticas a la Organización de los Estados Americanos (OEA) que manifestaron presidentes como Arce o López Obrador, Lacalle Pou manifestó su postura contraria. Dijo que Uruguay integra la Celac por una “concepción virtuosa, no reaccionaria” y porque “la Celac ha profundizado y ha ampliado su relacionamiento con otros países del mundo”, pero aclaró: “Esto no significa que por integrar la Celac de alguna manera caiga en desuso la participación en la OEA, queremos ser bien claros al respecto”. “Se puede discrepar con una conducción, pero no se puede desvirtuar el organismo”, añadió.
Por su parte, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, que habló en la reunión inmediatamente después de Lacalle Pou, le contestó al mandatario uruguayo: “Ponga usted presidente Lacalle la fecha y el lugar para un debate o ponga usted presidente López Obrador, y Venezuela está dispuesta a debatir sobre democracia, de libertades, de resistencia y revolución y de lo que haya que debatir, de neoliberalismo”.
Además de Lacalle Pou, Maduro y el anfitrión Andrés Manuel López Obrador (presidente de México), asistieron al encuentro Luis Arce (Bolivia), Miguel Díaz-Canel (Cuba), Guillermo Lasso (Ecuador), Carlos Alvarado (Costa Rica), Juan Orlando Hernández (Honduras) y Pedro Castillo (Perú).
Entre los temas que se tratarán durante la reunión está la presentación de los avances logrados, principalmente relativos a cómo se enfrentó la pandemia.
Segundo round
Tras la exposición de cancilleres y jefes de Estado, el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, pidió la palabra para contestarle a su par uruguayo. “La mención a Cuba que hizo el presidente Lacalle denota su desconocimiento de la realidad. El coraje y la libertad del pueblo cubano se ha demostrado durante seis décadas frente a la agresión y bloqueo de Estados Unidos, obstáculo fundamental para nuestro desarrollo, lo cual el presidente Lacalle no mencionó. Escuche usted a su pueblo que recogió más de 700.000 firmas contra la ley urgente que usted impuso”, dijo en referencia a las firmas recolectadas para convocar un referéndum contra 135 artículos de la ley de urgente consideración (LUC).
“Con el neoliberalismo se ha multiplicado la inestabilidad, la especulación, la deuda externa, el intercambio desigual, la tendencia a que ocurran crisis financieras más frecuentes, la pobreza, la desigualdad, y el abismo entre el norte opulento y el sur desposeído”, dijo el cubano.
Díaz-Canel aseguró que la OEA “apoyó los intentos de aislamiento a Cuba y las intervenciones militares en América Latina y El Caribe, golpes de Estado, dictaduras militares, incluso en su país [Uruguay], que Estados Unidos diseñó para contener la resistencia de los pueblos de nuestra América. La OEA guardó silencio mientras se torturaba en nuestra región y en su país. Es la que calla cuando se oprime, se asesina y se desaparecen latinoamericanos. No es en Cuba donde ocurren estos hechos. Es la OEA la que tiene un impresentable secretario general [Luis Almagro] que contribuyó, participó y ayudó en el golpe de Estado al gobierno de Bolivia en 2019” y dijo que eso fue lo que defendió Lacalle Pou.
Ante la intervención de Díaz-Canel, Lacalle Pou contestó que usó argumentos que no son ciertos, pero dijo que en Uruguay “por suerte la oposición puede juntar firmas” y tiene “resortes democráticos para quejarse”. “Esa es la gran diferencia con el régimen cubano”, sostuvo.
El uruguayo citó la canción cubana “Patria y vida”, que dice: “Que no siga corriendo la sangre por querer pensar diferente”, lo que generó una nueva respuesta: el presidente cubano opinó que el uruguayo tiene “mal gusto musical” y aseguró que el grupo de rap es un conjunto de artistas “en contra de la revolución”.