La resolución, el jueves, de la Junta de Transparencia y Ética Pública (Jutep) sobre la situación de Álvaro Danza, más que ponerle punto final a la polémica en torno a la actividad privada de Álvaro Danza, generó una serie de acciones políticas que parecen trascender la figura del propio presidente de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE). El primer movimiento luego de conocerse la decisión del organismo sobre la no incompatibilidad de la función pública de Danza con sus labores privadas fue el anuncio de su continuidad al frente del prestador público de salud y la renuncia a su actividad en las mutualistas. A pesar de que esto último parecía ser uno de los reclamos de la oposición, la forma en la que se procesó el tema en el ámbito de la Jutep despertó nuevas molestias.

Manifestaciones en redes sociales y declaraciones de prensa de distintos actores de la oposición dieron cuenta de duros cuestionamientos sobre la calidad técnica de la resolución de la Jutep y acusaron al organismo de actuar por motivos políticos. Lo que hasta entonces eran comentarios, se transformó el viernes en acciones, luego de una reunión de las bancadas del Partido Nacional, el Partido Colorado y el Partido Independiente. Allí se confirmó –a pesar de la renuncia de Danza al sector privado– la intención de interpelar a la ministra de Salud Pública, Cristina Lustemberg. Asimismo, se anunció que se interpelará al ministro de Educación y Cultura, José Carlos Mahía, y se le pediría una reunión con carácter de “urgente” al presidente de la República, Yamandú Orsi.

En una conferencia de prensa encabezada por el diputado independiente Gerardo Sotelo –quien será el miembro interpelante de Lustemberg el 24 de noviembre–, se detalló que la intención de interpelar a Mahía tenía como fundamento un pronunciamiento de la Jutep sobre el caso Danza, que “viola la ética y la transparencia”. Horas después, el ministro de Educación dijo a Subrayado que interpelar “es un derecho de la oposición” y le “parecen naturales los controles”. Sin embargo, reconoció que le “preocupa” la “adjetivación” que se está dando en el marco de los cuestionamientos a la Jutep.

“Acá hay gente con trayectoria, y uno puede estar de acuerdo o no con las resoluciones de quienes están en órganos del Estado, pero parece que si las resoluciones no son como quieren, empieza toda una catarata de adjetivos que no le hacen bien a la República”, afirmó el ministro. “No ha pasado un año de las elecciones que ya estamos en este tono; esto la verdad me preocupa”, agregó en la misma línea. Sobre los cuestionamientos en sí, dejó claro que las autoridades de la Jutep “actuaron con absoluta independencia”.

El FA cierra filas

Previo al jueves, mientras crecía la presión de la oposición, los distintos actores políticos del Frente Amplio (FA) respondían, al ser consultados por la situación de Danza, que se estaba esperando la resolución de la Jutep. Con esa instancia superada, y luego de la definición política de Danza de suspender su actividad privada, desde distintos sectores de la coalición de izquierda se entiende que es momento de dar el tema por terminado.

El coordinador de la bancada de Senadores y dirigente del Movimiento de Participación Popular, Daniel Caggiani, fue de los primeros en expresarse. Aseguró en una rueda de prensa que la interpelación a Lustemberg “no tiene sentido” y agregó que “no hay ninguna duda de que todos estos temas [...] quedan relativamente zanjados” con la resolución de la Jutep. El legislador remarcó que la decisión de Danza de renunciar al sector privado tiene sólo el propósito de que “no se lo siga persiguiendo políticamente”, y no se vincula a un reconocimiento de un incumplimiento normativo.

Desde El Abrazo –sector aliado de la ministra Lustemberg y al que pertenece Danza– el diputado Alejandro Zavala catalogó como “un poco caprichosa” la decisión de dejar en pie la interpelación a la ministra luego de que el presidente de ASSE renunciara a sus trabajos en mutualistas. Recordó que “el objeto de la interpelación era el artículo 200 de la Constitución”, norma que la Jutep afirmó que el jerarca no estaba incumpliendo, y que ahora menos aún se puede discutir, luego de su “renuncia” al sector privado. “Lo que estamos tratando de hacer es que se deje de hablar de este tema y se hable sobre la gestión de ASSE”, señaló el representante.

Gustavo González, senador del Partido Socialista, aseguró a la diaria que, luego de la resolución de la Jutep y del anuncio de Danza, el tema “ya está laudado”. “Estoy en contra de todo el circo que se está haciendo, nosotros nos tenemos que responsabilizar de gobernar y ellos de ser una oposición seria”, planteó el legislador. “Por ahí no pasan los grandes temas del país, estos son más bien el trabajo, la salud, la educación. A eso nos tenemos que abocar”, analizó.

El médico y senador de La Amplia Daniel Borbonet dijo a la diaria que entiende que “toda oposición tiene que estar viendo” lo que hacen quienes están al frente de los entes descentralizados, pero remarcó que es “muy desmedida y virulenta la reacción hacia la persona” de Danza. Apuntó que este tipo de actitud de la oposición “no le hace bien al gobierno” y agregó que “hay que dejar trabajar” al presidente de ASSE, porque “la población más vulnerable necesita que el directorio se dedique a trabajar para lo que fueron elegidos”.

Constanza Moreira, integrante del sector Casa Grande, manifestó a la diaria su expectativa de que a partir de las acciones tomadas por el gobierno se “cierre el caso Danza”. “Me parece completamente innecesario mantener la interpelación luego de esta decisión, pero para la oposición es una manera de mantener el tema en el tapete para distraer a la opinión pública de la atención a los temas del presupuesto, de la economía y la situación difícil que viven miles y miles de personas”, analizó la legisladora.

“Aún no hay en todo el primer año de gobierno un solo tema que haya merecido un proceso judicial, y el escrutinio ha sido de una intensidad inaudita; mientras nos esforzamos por sacar el presupuesto del país adelante, la política del espectáculo gana y distrae”, destacó Moreira.

La Jutep en la mira

Más allá de la anunciada interpelación al ministro de Educación por la decisión de la Jutep sobre el caso Danza, según lo ha mencionado públicamente el diputado Sotelo, también se maneja la posibilidad de denunciar al organismo ante la Organización de los Estados Americanos. De acuerdo a lo detallado por el representante, en ese escenario se buscará apelar a lo que pueda decir el foro regional a través de su mecanismo de seguimiento a la Convención Interamericana contra la Corrupción.

Los cuestionamientos, y la eventual denuncia, tienen como trasfondo en algunos actores de la oposición un cuestionamiento más profundo sobre la institucionalidad de la Jutep. El viernes, mientras se desarrollaba la reunión entre las bancadas nacionalista, colorada e independiente, afloraron visiones críticas sobre las características del organismo y cómo eso puede afectar sus resoluciones.

Según reconstruyó la diaria, quien trajo el tema a la mesa fue el diputado colorado Conrado Rodríguez. El propio legislador reconoció a este medio que desde su visión el organismo “no puede seguir teniendo una integración política”. Afirmó que entiende correcto ir hacia un sistema en el que se considere la participación de jueces retirados o “especialistas en derecho” de los que “nadie pueda sospechar de su imparcialidad”. Este tema, según detalló, lo volverá a poner en la agenda legislativa una vez culminen las interpelaciones sobre el caso Danza.

Sotelo coincidió, en diálogo con la diaria, en que la Jutep “cuanto más lejos esté de los políticos, mejor”. “Tiene que ir a un régimen en el que sus directores sean elegidos porque no tienen ningún vínculo político; exmagistrados, exmiembros de la Suprema Corte”, planteó como ejemplo. “Buscamos la cuotita política por las dudas, para levantar el teléfono si se nos complica, y además la estrangulamos, no le damos recursos, no tiene funcionarios, es una cosa espantosa”, puntualizó sobre la situación actual del organismo.

Por su parte, el diputado nacionalista Pablo Abdala dijo a la diaria que “todo es discutible y todo puede analizarse”, aunque marcó reparos sobre que este sea el momento de revisar las características estructurales de la Jutep. “Es la diferencia entre lo urgente y lo importante; ahora estamos en una situación de urgencia, en un problema institucional vinculado con este fallo de la Jutep, por la forma en la que se adoptó”, comentó.