El presidente electo, Yamandú Orsi, le “dio vacaciones” a su equipo hasta el 10 de enero, pero eso no quiere decir que toda la actividad política esté suspendida. Así lo demuestran algunos movimientos con miras a las elecciones departamentales de mayo y ciertos reclamos sobre política exterior respecto de Israel.

El Frente Amplio (FA) tiene la expectativa de repetir en el interior la performance de 2005, cuando a caballo del éxito en las elecciones nacionales precedentes conquistó un récord de gobiernos departamentales. El exintendente rochense Aníbal Pereyra explicó la semana pasada algunas de las tácticas que la fuerza política está implementando para alcanzar esa meta.

En Montevideo, por su parte, el FA parece orientado a presentar más de un candidato, tal como ocurrió en 2020. A la postulación del senador Mario Bergara se le sumó el llamado del Partido Comunista a presentar a Verónica Piñeiro, actual vicepresidenta de la coalición de izquierda, quien ya autorizó que se maneje su nombre.

Por su parte, el Partido Colorado y el Partido Independiente, que tienen pocas esperanzas de conseguir muchas intendencias en diciembre, buscan impugnar la reglamentación de la Corte Electoral que pone límites a las candidaturas en alcaldías (impide que se presenten candidatos que aparecieron en listas de otros partidos en el mismo ciclo electoral y el voto cruzado entre candidatos departamentales y municipales). El diputado colorado Felipe Schipani ve intencionalidad política por parte de la Corte, dominada por nacionalistas y frenteamplistas.

Emprendimiento cuestionado

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