El pasado 15 de febrero, Alejandro Astesiano, exjefe de seguridad presidencial, fue condenado a cuatro años y medio de penitenciaría por los delitos de asociación para delinquir, tráfico de influencias, revelación de secreto y conjunción del interés público y privado. La resolución del caso se dio luego de que el excustodio llegara a un acuerdo abreviado con la fiscal de Flagrancia de 12º turno, Gabriela Fossati.

La decisión fue cuestionada tanto por actores del sistema político, en particular, de la oposición, como por una gran parte de la ciudadanía. De acuerdo a un relevamiento de la Usina de Percepción Ciudadana (UPC), la mayoría de la población opinó que la condena fue “más leve de lo que debería ser” (61%), mientras que en menor proporción se consideró que era justa (26%).

Sin embargo, Fossati afirmó que está “muy contenta” con la resolución del caso. “Estoy muy contenta con lo logrado, lo que hice yo y, sobre todo, mi equipo, que trabajó muchísimo para resolver este caso”, dijo en diálogo con Montevideo Portal. Además, la fiscal señaló que realizó pedidos de informes de los últimos acuerdos abreviados y las condenas establecidas para tener un punto de comparación.

“El condenado es una persona, no podemos ponerlo en una plaza pública y acusarlo de lo que se nos ocurra sin un sustento legal y con un proceso que dé las debidas garantías”, apuntó Fossati y aclaró que no entrará en el debate político respecto a la condena definida. Asimismo, defendió que no podría haber logrado una mejor resolución y explicó que los procesos abreviados permiten disminuir la pena hasta en una tercera parte de lo que se debería aplicar por ley, según citó el mismo medio.

“Yo me tengo que regir por el lado de que estén dadas las garantías del acuerdo, y no puedo buscar que una condena sea un ejemplo para la sociedad. Trabajar así sería irreal e injusto para las personas involucradas”, expresó la fiscal, e indicó que su objetivo no fue que a Astesiano se “lo señale y condene”, sino que logre readaptarse a la sociedad. “Puede ser utópico, pero ese es el fin que los fiscales tenemos que perseguir”, manifestó.